Principios de los 24 quilates en la paternidad y maternidad

En esta temporada de amor y amistad, reflexionamos sobre uno de los vínculos más puros y profundos que existen: el amor hacia nuestros hijos e hijas. Inspirados por el principio de los 24 quilates, "Trate a sus hijos como le gustaría que los trataran los demás", compartimos un extracto del libro "Emotionally Intelligent Parenting" de Maurice J. Elias, que aborda aspectos fundamentales sobre el amor y los límites en la crianza de niños y niñas cuando experimentan emociones intensas.

Mientras el principio de los 12 quilates nos invita a tratar a los demás como nos gustaría que nos traten, el principio de los 24 quilates nos invita a tratar a los hijos e hijas como le gustaría que los traten los demás.

Sintonizando con las Emociones

El primer paso hacia una crianza emocionalmente inteligente es la conciencia de nuestros propios sentimientos y los de nuestros hijos e hijas. Al expresar sinceramente nuestras emociones en diversas situaciones, creamos un espacio para un valioso intercambio personal que fortalece nuestro vínculo con ellos.

Empatía y Comprensión

La empatía es la clave para comprender los puntos de vista de los demás, incluidos los de nuestros hijos e hijas. Al ser empáticos, no solo entendemos sus emociones, sino que también les mostramos que sus opiniones son valoradas y respetadas.

Manejando los Impulsos con Positividad

En lugar de depender de premios o castigos para calmar los impulsos emocionales, fomentemos en nuestros niños y niñas la capacidad de enfrentar y regular sus emociones de manera positiva. La gratificación instantánea puede ser tentadora, pero el autocontrol cultivado a través de la resiliencia es una herramienta más poderosa a largo plazo.

Dotes Sociales en la Crianza

La comunicación efectiva y la resolución de problemas son habilidades sociales vitales que deben ser enseñadas y practicadas desde una edad temprana. En lugar de resolver los conflictos por ellos, permitamos que nuestros hijos e hijas exploren el poder de su voz y aprendan a manejar sus relaciones de manera constructiva.

Educar sin Manipular

Nuestros hijos e hijas no necesitan ser manipulados con premios o castigos. En cambio, necesitan que les enseñemos habilidades para regular sus emociones y enfrentar los desafíos de la vida con resiliencia. Al establecer límites claros y guiarlos con amor y comprensión, les brindamos las herramientas necesarias para su desarrollo integral.

En el Colegio Waldorf Tabasco, invitamos a que adapten el principio de los 24 quilates cons sus familias, guiando a nuestros niños y niñas hacia un crecimiento emocional y personal significativo.

Anterior
Anterior

Construyendo puentes: La convivencia igualitaria en el hogar y la escuela.

Siguiente
Siguiente

Año nuevo lunar. Los dragones están sueltos.